Escándalo judicial crece con pago millonario a abogados.
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Un escándalo de corrupción judicial se está haciendo más grande. Una investigación de CIPER reveló que los abogados Mario Vargas y Eduardo Lagos recibieron $410 millones de una inmobiliaria. El objetivo era sacar al juez Sergio Muñoz de un caso que la empresa estaba perdiendo. Lo lograron, y con la ayuda de otros jueces, la decisión del juicio se revirtió a favor de la compañía.
Ahora, uno de los jueces que ayudó, Diego Simpertigue, está muy complicado. Tras revelarse sus vínculos con los abogados, que incluyen viajes juntos, estaría intentando renunciar a la Corte Suprema. Todo esto ha generado una crisis en el poder judicial, que ya había perdido a otra jueza por el mismo caso.